El viernes 3 de agosto del
presente año, la comunidad de educadores, estudiantes y trabajadores de la
institución educativa Luis Patrón Rosano, se tomaron las principales vías del
casco urbano Tolú, haciendo estación en la carrera segunda entre la 15 y 16, para manifestar su indignación por el delicado
estado de inseguridad al que lo ha llevado la actual administración
municipal presidida por el señor Ariel Alvarado Monte, quien funge de alcalde
de esta infortunada villa.
Durante un buen rato, los asistentes permanecieron frente a la sede
del gobierno municipal, agitando consignas contra la corrupción, y contra la
complicidad de esta y la anterior administración con los contratistas que
construyeron el polideportivo en los predios del colegio, y que a estas altura
permanece como obra negra, inconclusa; pero que sin embargo el actual gobierno
inexplicablemente recibió hace aproximadamente un año, sin poder transferir
formalmente ésta a la dirección del plantel por cuanto su estado no responde a
los términos establecidos en el contrato respectivo.
No obstante, para escándalo de
los más cándidos ciudadanos, ni el gobierno González González ni el actual, si
es que uno y otro merecen ser llamados gobiernos, han movido siquiera una hoja
para ventilar publicamente esta anormalidad. Y antes que exigir a los
contratistas, el cumplimiento ante los órganos de control, de la “poliza de
garantía”, sin pudor alguno están intencionalmente permitiendo que ésta
prescriba (en acto de complicidad manifiesta) para que aquellos abusadores, y
ellos como parte interesada en el ilícito, salgan indemnes, y el patrimonio
público (en miles de millones) se pierda en los bolsillos avaros de quienes
posan como ciudadanos y gobernantes decentes, muriendo tales delitos en la más
grande impunidad; engrosando la larga lista de aberraciones que vienen de
gobiernos anteriores en línea sucesiva.
En este terreno de la inmoralidad administrativa sí que se ha venido
dando una desaforada competencia entre estos malos y peores gobiernos!!!
Como cosa rara, extraordinaria, cuando la multitud escolar
aglomerada frente a la alcaldía,
indagaba por la primera autoridad para el abordaje de la realidad que
acosa al “Luis Patrón”, desde el cielo un coro de serafines anunciaba a los cuatro
vientos: El alcalde no está, se halla en
retiro
espiritual resolviendo los problemas de Tolú!
Mas, cuando la marcha retornaba
al colegio, una llamada ingresó al teléfono del rector: Era el alcalde
intentando crear confusión y anunciando falsas imputaciones a los
manifestantes, siendo que la marcha brilló por el excelente comportamiento de
los participantes! Y ríanse: El alcalde finalmente para jugar de “listo” le
comunica al rector que él se declara, “presto a estar en comunicación con
rectoría las veinticuatro horas del día”, que “su teléfono estaba abierto”.
Pero cuando se clausura la llamada, la pantalla del celular registra un mensaje
según el cual “el teléfono desde donde se llamó, era desconocido!”
Esa es la típica actuación de un charlatán, y cuando la charlatanería es el
talante de un gobierno, por favor, no existe la más mínima de garantía de
CONFIABILIDAD. Y sin ésta, la
comunicación misma, es un fraude.
La comunidad de educadores y
estudiantes del “Luis Patrón” ante la persistencia del mal denunciado, se
ratifica en estado de ASAMBLEA PERMANENTE hasta nueva orden.
Y para cerrar la presente nota, entre curiosidades,
paradojas y sobreabundancia de padecimientos po parte de este pueblo (que bien
con otra “suerte” pudiera ser “experiencia piloto de paraíso, humano”), nos
encontramos ese mismo día en la tarde, y por la mañana del sábado (4 de agosto)
con los pregoneros de la rumba y el ridículo, anunciando al mundo globalizado que:
“…otro gran líder del pueblo, cumplía onomástico!”, razón por la cual Tolú se
hallaba de pláceme, e invitado estaba para compartir la gracia de los cielos con
su majestad, el cumplimentado “que tiene con qué ser el próximo nuevo
alcalde!!!. De Ripley.
Ramiro del Cristo Medina Pérez
Santiago de Tolú, agosto 4 - 2013
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